Quince días. Es lo que se necesita de trabajo constante a lo largo del día y también por la noche. A partir de la preparación del carbón, con la formación de una pirámide de madera alta más de dos metros, con espacio en el centro para la chimenea. Y después todo cubierto con paja y tierra. Las brasas en el interior. Y parte la fogata.

Pero antes de eso, en primer lugar, tienes que cortar leña, en armonía con la naturaleza a su alrededor, un proceso que también significa servicio al territorio, con el control y el cuidado de los bosques. Trabajo antiguo, duro, de economía de la montaña. Pasado de generaciones con sus secretos que incluso hoy en día, con las ascuas, contribuyen a mantener viva la pasión. A pesar de todo. Y a pesar de la competencia del carbón industrial.

Pero lo que surge de las largas etapas de proceso aquí es el carbón vegetal, único hecho con madera de los bosques. Así como saben los dueños de restaurantes en la zona que lo eligen por la calidad y la estanqueidad y debido a que no contamina el área de la cocina con olores que no sean los de la querida madera.

El antiguo arte de la carbonización de puede admirar en Borgo Pace.Fuego que se une a la tradición del hogar, castillo de madera en la belleza de un territorio vivo de agua.