Borghi

Castillos suspendidos entre mar y montañas. Los caminos de viñedos y olivares diseñan el perfil de un área que se enceuntra en el medio entre el mar Adriático y los Apeninos. Un paisaje rodeado de murallas, enmarcado por la lenta corriente de los ríos Rubicón y Uso y caracterizado por los caminos recorridos por los caminantes en busca de “raponzolo” y otras hierbas selváticas.

El municipio de Borghi a lo largo de la frontera entre Romagna y el Montefeltro, fue fundada de la unión de tres comunidades antiguas que fueron independientes hasta el final del siglo XVIII: Poggio de Borghi, San Giovanni in Galilea y San Martino in Converseto. El origen de estos tres centros y los hallazgos encontrados en la zona del actual centro histórico comprueban el desarrollo entre los siglos VI y IX. Su historia está vinculada con el destino de las familias que han tenido el dominio: bajo la jurisdicción de Santarcangelo fue destruido alrededor del año 1300 por un ejército enviado por el Visconti, después a mitad del siglo XV pasa bajo el control de los Malatesta y de Antoniogli Atti, el hermano de Isolda, la esposa de Sigismondo Pandolfo, para acabar entre las posesiones de los Estados papales (mediados del siglo XVII.

El núcleo antiguo de Borghi aparece oculto en la sombra de una imponente muralla de la ciudad que se remonta a la época de los Malatesta. El perímetro de piedra, construido en 1335 durante la era de Sigismondo Pandolfo Malatesta y más tarde renovado por Camillo Sassatelli, fue severamente dañado durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial y pacientemente reconstruido en los años cincuenta. Hoy en día las paredes conservan dos torres circulares en las esquinas y dos entradas, las escaleras de piedra hacia el este y la rampa de calzada al oeste, en lugar de la puerta fortificada, que conducen los visitantes dentro de la característica estructura medieval. Entre los edificios de prestigio cabe destacar la Chiesa di Santa Croce (Iglesia de la Santa Cruz), construida entre 1580 y 1594, pero ampliada y restaurada en 1737, con el campanario que data del período de la posguerra y la logia del siglo XIX que cubre la antigua cisterna para las reservas de agua. Más en las albufueras encima a una colina se encuentra la Chiesa di San Cristoforo (iglesia de San Cristobal), recordada desde 1144, reconstruida en el siglo XIX y en fin restaurada después de la guerra.

El pueblo de San Giovanni in Galilea (San Juan de Galilea) aparece como un balcón natural que se extiende sobre un promontorio rocoso en la llanura verde salpicada de las rocas de Montebello, Torriana, Verucchio y San Marino. Entre los testimonios de sus antiguos orígenes se subraya la zona arqueológica de la iglesia con la característica Chiesa di San Giovanni Battista (Iglesia de San Juan Batista), el museo y la biblioteca Renzi. Muy cerca se encuentran los restos de la fortaleza y de la torre, testimonios de la antigua mansión que fue un bastión de la línea Gótica.

La cultura vibrante está comprobada por fiestas que se celebran en diferentes épocas del año. Entre éstas cabe destacar el festival de "Bustrengh", el pastel dulce especial hecho con más de 20 ingredientes diferentes por las amas de casa del lugar, celebrado en Borghi en mayo. El programa incluye no sólo la degustación, sino también música, bailes populares, artistas callejeros, pintores y artesanos que recuerdan los antiguos oficios.